dimecres, 26 de setembre del 2012

Chicago

25.09.2012


 

Pues bueno, ya estoy en Chicago. En realidad me voy mañana, después de pasar unos días estupendos en esta magnífica ciudad que tanto me ha sorprendido. Aún no tengo claro si me gusta más Chicago que San Francisco, pero casi seguro que si tuviera que vivir en ella me decantaría por Chicago, pero con el clima de San Francisco. Yo he tenido suerte y he disfrutado de unos dias con un tiempo muy bueno, pero a la ciudad la llaman "la ciudad del viento" y por lo que he leido el clima es bastante malo en general.

 
 

 

Tengo que darle las gracias a Maria Cecilia, la chica colombiana, por recomendarme venir a conocerla (yo no la había incluido en mi plan de viaje). Es una pena que no leyera el mensaje n el blog y que no haya contactado conmigo. De todas maneras le vuelvo a dejar un último mensaje: "María, perdí tu mail y no sabía como contactar contigo, así que te dejé un mensaje en el blog para ver si lo leías. No ha sido así. Lo siento mucho, me hubiera encantado volver a verte. Fue un placer conocerte. Escríbeme al mail (sba8922@gmail.com). Tenías razón, Chicago me ha encantado."

Perdonad el inciso, sigo a lo mio. El hostel donde me he alojado estaba muy bien, pequeño y encantador, y situado en un sitio perfecto. He estado alojada en una buhardilla con 6 camas y las chicas con las que he compartido habitación han sido todas muy simpáticas, especialmente Georgina, una "chica" de unos 70 y pico años, de Perth, Australia, que la teníais que haber visto. Simpática, vital, y siempre con su iphone arriba y abajo. Majísima.

La ciudad desde el principio me gustó muchísimo. Tiene sitios muy bonitos y todo muy limpio.

 
 
 
 

Está situada a las orillas del lago Michigan, en la costa suroeste del lago, y más que un lago parece un mar. No te moverías de sus alrededores: la Oak street beach, con sus jardines y playa; el Lincoln Park, con el zoo que puedes visitar gratis; el Burnham Park, con sus museos, acuario, planetario; el Navy Pier, con su noria; y el Millenium Park, que me tiene enganchadísima, con su bola metálica, que he leido que es "una escultura que parece una gota de mercurio líquido", y donde se reflejan los edificios de la ciudad. No hay día que no haya pasado a verla. Aparte el parque tiene el Pabellón de Conciertos, maravilloso, con gradas y cesped, y también una escultura-fuente creada por un español, que también engancha mucho porque son caras que van cambiando la expresión. Total, obras de arte espectaculares, de verdad.

 
 
 
 
 
 

Durante estos días he vuelto a andar kilómetros y kilómetros, visitando un par de playas, sus más bonitas calles, sus edificios más destacados y sus barrios más famosos: chinatown, el mexicano, Old Town, Downtown, Burnham, ...

 
 
 

En fin, lo dicho, otra ciudad de la que me enamoro.

 
 
 
 

Ah! Que lo sepais, hoy es el cumpleaños de una de mis primas Gené, de Esther, y mañana el de mi primo Miki, así que a ver si les felicitais. :)

 
 

divendres, 21 de setembre del 2012

Nashville - Tennesse

20.09.2012

 

Ya vuelvo a estar aquí. El viaje de New Orleans a Nasville fue bien, a pesar de durar 16 horitas. Ningún altercado ni nada digno de mención. Eso sí, como siempre, una vez llegas a la ciudad toca la panzada de andar hasta el hostel con la mochila que cada vez llevo peor.

 
 
 
 

Nasville es una ciudad pequeña, o lo parece, pero es alucinante. La llaman la ciudad de la música y es que no la pueden llamar de otra manera. En todos los bares hay grupos tocando y por las calles músicos tocando música country. Es una pasada! A partir del mediodía, o antes, ya empiezas a oir la música que suena en directo. Mucho vaquero y mucha campera: esto es Tennesse!!!

 
 
 
 

 

Aparte de los bares, la ciudad "es" música. Sus principales atractivos son el "Rynam Auditorium", desde donde empezó a emitirse el programa que lanzó a los más famosos cantantes de rock y el único lugar donde he pagado entrada para un tour guiado (17 dólares); el "Tennesse Performing Arts" para ver las mejores actuaciones de música y que creo que se verá superado por el "Music City Center, un edificio enorme que está actualmente en construcción; el Country Music Hall of fame, museo de la música country; y el Grand Ole Opry, actual auditorio desde donde se retransmite el Show que lleva el mismo nombre y que se empezó a emitir en el Rynam. Yo me acerqué a verlo (45 minutos de autobús local), pero no entré. Me dediqué a pasear por los alrededores, donde se encuentra el gran centro comercial "Opry Mills" y a visitar el interior, expectacular, del "Gaylord Opryland Resort".

 
 
 
 
 
 

La ciudad aunque tiene poco que visitar, y todo está muy concentrado en la misma zona, me ha gustado porque es "diferente". Con muchos edificios tipo "industrial", con ladrillo marrón y grandes ventanales, la ciudad adquiere ese aspecto tan diferente de las otras ciudades que he visitado.

 
 

En estos tres días he subido y bajado por las mismas calles un montón de veces y me he entretenido sentada en cualquier banco escuchando la música que sonaba al lado, pero es que es alucinante, vas andando y las calles Broadway y la 2a. Avenida están llenas de bares, practicamente puerta con puerta, y en casi todos hay música en directo, y hasta alguna aficionada o aficionado que se lanza a bailar acompañando la música con los taconazos de sus botas. Para estos últimos también está el "Wild Horse saloon" (creo que es ese su nombre) donde se baila música country y que también lo retransmiten de vez en cuando por televisión.

 
 

 

Y no me puedo marchar sin comentar la anécdota de estos días: anteayer salí pronto por la mañana y, como aún tenía galletas, me compré un batido de chocolate. Busqué un banco, puse mi canguro en él, porque había estado lloviendo toda la noche, y me senté a disfrutar del desayuno. Al momento se me acerca una señora, sobre los 60 años, bien vestida, y con una bolsa colgando, y me sonríe y me dice "buenos días, ¿Quiere una botella agua?", ofreciéndomela al mismo tiempo". Yo veo que está precintada y, sin pensarlo, la cojo. Luego me dice "¿Y una pieza de fruta?, y yo le digo que "no, gracias" (no sé exactamente porqué). Me sonríe de nuevo y sin darme tiempo a entablar conversación se va. La sigo con la mirada y veo que se dirige a un grupo de "sin techo" que hay en el parque de al lado, y posteriormente a otro mendigo que anda por allí, ... y les ofrece AGUA Y FRUTA!!!. Que me ha tomado por una "sin techo"!!! A mi!!! Que vale que no he traido los mejores vestidos para el viaje, pero de ahí a tomarme por "homeless"! En fin. Luego aún la ví "ayudando" a los pobres. Por unos momentos se me pasó por la cabeza que no fuera una psicópata que se hubiera asignado la tarea de limpiar la ciudad de "gentuza", pero la desestimé enseguida porque realmente no lo parecía.

 

Aún sigo alucinando, cuando no riendo. Lo que no me pase a mi.

Bueno, hasta la próxima entrada. Me quedo aquí esperando el autobús para Chicago (9 horas), mientras fotografío a unos amish y me fijo en la noticia que están dando ahora en la tele, ANDA!!!

 
 
 

dimarts, 18 de setembre del 2012

MENSAJE PARA MARIA CECILIA

Esto no es una nueva entrada del blog. Lo siento, pero no tengo otra manera de comunicarme con esa persona.

María, no encuentro tu dirección de mail. Supongo que rompí la página donde estaba escrita sin darme cuenta.

Mi mail es sba8922@gmail.com. Envíame el tuyo, por favor.

Este próximo fin de semana por fin estaré en Chicago y me encantaría verte de nuevo, pero para ello necesito tu mail y ponernos de acuerdo sobre dónde quedar.

Evidentemente, si no quieres volver a verme solo tienes que hacer ver que no has leido la entrada a tiempo y ya está. Jajaja

Dejando el Mississippi

16.09.2012

 

Ya vuelvo a estar esperando otro autobús. Como aún me quedan más de 2 horas aprovecho para escribir esta entrada del blog.

 
 

En estos dos días he visitado lo que me faltaba: el Gardens District y la zona del rio donde se encuentra el principal centro de ocio de la ciudad, con el IMAX, el Casino, el Acuario, etc. He sudado como un cerdito porque en esta ciudad hace un calor impresionante.

 
 
 

No visité la zona más afectada por el Katrina porque estaba lejos y pagar por un tour para ver los restos de algunas casas no me parecía una buena idea. La verdad es que ya hace 7 años de aquello y otras casas que se vieron afectadas ya han sido o están siendo restauradas. La gente se ha volcado en dejar la ciudad otra vez como estaba para recuperar turismo, aunque es verdad, según he leido, que muchos de los afectados se fueron de la ciudad y ya no han vuelto. Existe un organismo oficial, el FEMA, que gestiona y se dedica a reconstruir las ciudades que sufren desastres de este tipo, y durante estos dos días que he estado por la ciudad me los he encontrado por todas partes. Reparando tendidos eléctricos, arreglando daños en la biblioteca central, incluso en mi hostel esperaban su visita para no sé qué. O sea, que quien espere encontrarse una ciudad en ruinas que se vaya olvidando.

 
 

Otro tema: En el hostel, pese a ser un desastre, me he encontrado muy a gusto. La mayoría de los huéspedes no son turistas, son gente entre los 25-50 años que viven allí habitualmente. Son casi todos muy simpáticos y enseguida entablan conversación contigo. El barrio está bien. La calle del hostel está entre una importante avenida con gran movimiento y otra zona bastante más pobre, con casas en mal estado, derruidas o hechas polvo, y con grupitos de chicos de raza negra que a veces dan un poco de "yuyu", pero en ningún momento me había sentido insegura ... hasta hoy que, cargada como una mula, venía hasta la estación de autobuses. Como era de día había decidido andar hacia arriba, por la zona pobre (o lo que estoy segura a mi me parece zona pobre y para ellos no lo es, porque la ciudad es muy grande y esto está en el centro). Conforme me alejaba de mi calle me iba encontrando más casas deshabitadas y en mal estado y más chavales "sospechosos", así que he cambiado de dirección para dar más vuelta y evitar aquella zona. De golpe, en una calle vacía, me aparecen de un callejón 2 chavales con pinta de "fumados", camisetas imperio y gorras de beisbol del revés, y veo que vienen directos hacia mi. Ahí ya he pensado "has begut oli". Se me plantan delante y me dice uno: "tienes un teléfono para hacer una llamada?". Yo, como si nada, le respondo: "no, no tengo teléfono" y en ese momento ya estoy pensando que ahora viene cuando me dice que le gusta mi mochila y adiós mochila, IPAD, dinero y documentación. Pero no, simplemente me ha mirado con aquellos ojitos y se ha marchado. En fin, yo he acelerado el paso hasta alcanzar la avenida principal, no fuera el caso que decidieran volver, y al rato ya estaba aquí.

 
 
 

Aquí hay una cosa que me ha sorprendido bastante: la gente saluda mucho por la calle. Cualquiera que se cruza contigo te saluda. Incluso los mendigos o sin techo te saludan con su "hola, cómo va?" y yo ya voy saludando a diestro y siniestro y hasta hay un grupito de ellos que ya me reciben con sus mejores sonrisas. Que majos! (esto lo diría una amiga mía, que ya sabrá que me refiero a ella).

 
 
 
 

Es igual que con mi compañera de habitación, la vecina de cama de estas dos últimas noches. La primera noche con los eructos pensé "tela marinera la marrana ésta". Es una chica joven, negra, con un volumen como el de la chica protagonista de la película "Precious", que ganó un Oscar hace 2 o 3 años (ella o la película). La primera noche empezó con los eruptos. Una hora después me despertó por el ruido y al volverme me dijo que se iba a buscar una cerveza. Unas 2 o 3 horas después me despertó de nuevo y estaba comiendo galletas compulsivamente y, finalmente, hacia las 8 de la mañana otra vez se puso a comer como poseida. Imaginaos la imagen que tenía yo de ella. Pero por la tarde estuvimos hablando y la verdad es que era muy agradable. Me dijo que hoy ya se encontraba mejor, que había pasado una mala noche (y yo!) y que a ver si podía descansar hoy. Mientras se marchaba hacía la habitación, sudando, me dió pena porque pensaba que tiene que ser realmente duro tener que vivir con ese peso.

 
 

Pero bueno, sigamos. Una curiosidad que no quisiera dejarme: resulta que el primer día, en el primer albergue, ví que de las ramas de los árboles del jardín, colgaban varios collares de colores, como de perlas, pero de plástico, y pensé que seguramente serían los restos de alguna fiesta organizada por el albergue. Estos días he visto muchos más, en árboles, en balcones, en verjas, por toda la ciudad, y es que para la fiesta principal de la ciudad, el "Mardi Gras" (Carnaval) la tradición es lanzar collares a la gente durante los desfiles. Estos collares al final acaban formando parte de la decoración de la ciudad. Curioso, no?

 
 

Y confirmado: el puente de New Orleans es muy alto, si se tiró Ylenia se mató fijo. Enviarle un whatsapp a la Lidia Lozano.

Bueno, y esto es todo lo que ha dado de sí New Orleans. Me voy llenita de picadas. Los mosquitos y algún otro bicho (porque algunas claramente no son de mosquito) se han alimentado de mi cuerpo estos días. La cuestión es que yo me ponía anti-mosquitos porque en esta zona es donde más casos se han detectado del mosquito del Nilo, pero ni con esas. En fin. Y ahora hacia Nashville, a ver si me encuentro con algún cantante de country famoso. Uhmmm, conozco alguno?

Y esta foto, mala, se la dedico a mis primas Las Gené :)

 
 

Ay! Perdón, perdón, perdón, que no se me olvide: UN SALUDO muy grande a todos los que no escriben, porque no lo consiguen o porque no les da la gana, pero siguen fielmente las entradas y comentarios del blog: especialmente a Assumpta, Espe, Ana Bartolí, mis tios, Mercé ... y los que ahora no recuerdo. A todos los que escriben regularmente o de vez en cuando y me alegran el día con sus comentarios (a todos). Y también para todos los que desconozco que me siguen :).